Pues casi emulando a Ripley el modus operandi fue: Probando el fotométro de la cámara y utilizando las prioridades, como me había sugerido mi amigo Kiko Esperilla, divisá al sugeto subido en mitad de la rampa del puente mientras los de abajo le hacían la fotito, no sé si para el recuerdo o para la posteridad. Lo que pasa en estos casos es que no se baja igual que se sube. Creo que lo pasó un poco mal.
¿En serio? ¿No tiene truco?... ¡Hay gente pa to!.
ResponderEliminarUn abrazo
Muy buena. Ese tipo del fondo, ¿finalmente llegó a tierra vivo? ¡Qué valor!, y qué suerte tener la cámara preparada para disparar.
ResponderEliminarUn saludo.
¿Pero de donde venía ese hombre? Ampliando un poco la imagen me parecen bomberos pero no estoy seguro. Buena oportunidad.
ResponderEliminarSaludos.
Pues casi emulando a Ripley el modus operandi fue:
ResponderEliminarProbando el fotométro de la cámara y utilizando las prioridades, como me había sugerido mi amigo Kiko Esperilla, divisá al sugeto subido en mitad de la rampa del puente mientras los de abajo le hacían la fotito, no sé si para el recuerdo o para la posteridad. Lo que pasa en estos casos es que no se baja igual que se sube. Creo que lo pasó un poco mal.
Un saludo
Y todo eso has escrito mientras hablábamos?
ResponderEliminarEs una maner de jugarse la vida estúpidamente, como otra cualquier.
ResponderEliminarBien captado el momento, Miguel Ángel.
Un abrazo.
Da miedo verlo...cuantas veces nos jugamos la vida tontamente.
ResponderEliminarMuy bien captado.
Besos